A partir de las transformaciones
operadas en el sector como consecuencia
del proceso de transferencia de los ramales
de carga de Ferrocarriles Argentinos a concesionarios
privados, producida en 1991, las líneas
férreas vinculadas a la ciudad fueron
otorgadas a las empresas Ferroexpreso Pampeano
y Ferrosur Roca.
Ferroexpreso
Pampeano es quien realiza el mayor
porcentaje del traslado de cereales y subproductos
a las terminales de granos localizadas en
el Puerto de Bahía Blanca. Las cifras
referidas a los volúmenes transportados
muestran un notable incremento desde el
inicio de la actividad. Los principales
productos transportados son trigo, maíz,
girasol, soja, pellets y aceite. En general,
el origen de las cargas son las zonas centro
y norte de la Provincia de Buenos Aires
y este de la Provincia de La Pampa.
También presenta
una importancia destacada el transporte
de productos petroquímicos desde
las plantas del Complejo Petroquímico
local hacia Buenos Aires. Los traslados
son realizados principalmente por Ferrosur
Roca y estos productos constituyen el principal
rubro que opera esta empresa en la ciudad.
En 1998 el movimiento anual fue de aproximadamente
300.000 toneladas de productos procedentes
de Polisur e Indupa, tanto a granel como
en contenedores. Este movimiento ha experimentado
un crecimiento de aproximadamente un 25%
desde el inicio de sus actividades en el
año 1993. También realiza
transporte de cereales con destino al puerto
local, pero en menor magnitud que la empresa
citada anteriormente. Los mayores despachos
de cereal transportados por Ferrosur se
realizan hacia el Puerto de Quequén,
desde donde salen los embarques con cereales
provenientes de la zona de Balcarce, Azul
y Tandil.
La
actividad del transporte ferroviario de
carga presenta alentadoras expectativas
basadas fundamentalmente en las perspectivas
de traslado de la producción de Profertil
que, según los encargados del proyecto
prevé enviar aproximadamente un 30%
del fertilizante a la zona norte de la Provincia
de Buenos Aires y sur de Santa Fe y Córdoba.
Red
vial y ferroviaria »
La destacada red de carreteras que confluye
en la ciudad la vinculan con diferentes
regiones del país. En efecto, entre
las principales conexiones viales de Bahía
Blanca con el resto del territorio argentino
pueden mencionarse las rutas nacionales
3, 22, 33, 35, 229 y 252 y las provinciales
51, 007-01, 007-05, 007-06. Resulta significativo
señalar la reciente culminación
del camino de circunvalación que
permite que el flujo vehicular rodee la
ciudad sin necesidad de ingresar en la misma.
Con
respecto a la red ferroviaria, sin duda,
el Puerto ha jugado un papel fundamental
en la consolidación del sistema durante
las últimas décadas del siglo
pasado. En efecto, el tendido de líneas
por parte de capitales ingleses y franceses
respondió a la necesidad de dar salida
a las producciones del país hacia
los mercados externos. Estos ramales comunican
al puerto local con la Capital Federal y
con las regiones mesopotámica, centro,
cuyana y norpatagónica.
Proyecto
Ferrocarril Trasandino del Sur »
La posibilidad de concretar el proyecto
del Ferrocarril Trasandino que uniría
las ciudades portuarias de Bahía
Blanca con Talcahuano-Concepción
(Chile) a través del corredor bioceánico
será un factor que dinamizará
aún más la operatoria del
puerto local. Además, no sólo
significará un elemento de integración
con la región trasandina, sino que
también promoverá el desarrollo
de una vasta zona de nuestro país.
Por otro lado, además de facilitar
el intercambio comercial recíproco,
permitirá el tráfico de productos
chilenos hacia el mercado europeo y de la
costa este de Estados Unidos, así
como de productos nacionales con destino
a los mercados asiáticos y a la costa
oeste de Estados Unidos a menores costos
El enorme interés
que genera respecto a las perspectivas para
el Puerto de Bahía Blanca y su hinterland
está dado no sólo por la posibilidad
de exportar productos de Bahía Blanca
y una amplia zona de la Provincia de Buenos
Aires, sino también por la posibilidad
de que los productos brasileños puedan
llegar por barco al puerto local, para luego
ser transportados por ferrocarril y/o carretera
al país trasandino. Desde este enfoque,
el proyecto tiene un interés no sólo
binacional, sino multilateral, involucrando
a través de nuestro puerto al enorme
mercado brasileño.
Teniendo en cuenta la gran
competencia que existe en el comercio internacional
y la urgente necesidad de acceder a nuevos
mercados, especialmente sobre el Pacífico,
donde se desarrolla gran parte del comercio
mundial, resulta fundamental buscar una
estrategia de salida hacia este océano.
En este sentido resulta interesante contar
con una alternativa como el Corredor que
permitirá una importante reducción
de fletes y consecuentemente mayor competitividad
para los productos argentinos.